El dibujo es lo más inmediato para dar forma y desarrollar un espacio.
Es la columna vertebral de toda imagen. La línea varía infinitamente. Puede ser flexible, vigorosa, entrecortada, rígida, determinada, febril y todo lo que queremos que sea. Por su ancho y la intensidad de su tono puede flotar o integrarse al fondo, entonces la profundidad se desarrolla.
Base de la pintura, el dibujo es independiente y encarna a su manera, la idea de la ciudad ideal y del paisaje.